Pasan los días, horas y no son junto a ti. Es verte con ella y mis ojos entristecerse. Desde aquel día 22 de octubre del 2010 no hemos vuelto a pasar muchos momentos juntos. De los pocos, el más bonito fue el 18 de diciembre del 2011. No es que lo pasara muy bien, porque tenía que ver como tú y ella estabais abrazándoos y divirtiéndoos, cosa que para mi era difícil. Ver como yo podría ser ella, la que estuviera abrazándose y divirtiéndose contigo me mata. Me mata el dolor, me consume poco a poco. Aunque no lo pasara muy bien, me hiciste caso, no pasaste de mi como haces habitualmente.
Tengo ganas de ti, de un saludo, una sonrisa o una simple conversación por messenger como las de antes. Volver a sentirme a 3 metros sobre el cielo, sentirme la única en tu vida. A veces me pregunto como sobre vivo al día a día, porque puedo vivir sin ti pero no vivo totalmente feliz. Porque me faltas TÚ, me falta ese enorme hueco en mi corazón que te llevaste cuando me dijiste adiós.
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